2014

Casi sin lista de propósitos...
Sin lista de regalos pues no espero nada de santa claus ni de los reyes,cómo todos los años,será que no he sido buena...jaj
Sólo espero cambios,sé que si,el 2014 va a ser mi año,primero por que toca,segundo por qué el 14 es mi número,lo sé...
Faltaron muchas cosas por llegar este año que parecían prácticamente rodadas pero no llegaron,no se cuajaron,proyectos,sueños,ideas,fuerzas,ganas,ilusiones,y más proyectos y más sueños.
Para el 2014 sólo tengo una cosa planeada,pero,aún así,dejaré que el destino me sorprenda,ya no tengo mucha capacidad de organizar ni pensar ni organizar...
Si sé que las decepciones,cada año,pesan más,aún que se sobrellevan mejor,si sé que los palos siguen llegando,pese a que a estas alturas de la película ya debería tener asumido que la gente no es lo que parece,y que no podemos esperar nada de nadie,para de esa forma no caer,ni necesitar volver a levantar,ya bastante tenemos con los batacazos de la propia vida cómo para andar complicando más la historia...
2014...tremendo,aún recuerdo cuando pensar en el 2010 era hablar del súper futuro lejano...y ya estamos aquí,y el tiempo vuela,y pasa,y pasa volando,jajaj
Este 2013 me hizo perder la paciencia,casi la esperanza,algún amigo,un poco de salud y bastante pelo...ganar un montón de kilos,otros amigos,un poco de sabiduría,y,especialmente un grandísimo proyecto en el que tengo puestas todas mis expectativas.
Reconozco que nada es lo mismo,ni yo soy la misma persona a la que conoceis,algunos hace años ya...al principio decía no me reconozco,necesito recuperarme,vover a ser yo,pero,ahora digo,NOOO,no quiero volver a ser yo,no voy a volver a ser yo,por que cada momento,cada etapa tiene su aquel,y esta etapa tiene también su grandísimo punto positivo y es que me doy cuenta de que pienso mucho más en otros que en mí,que lo primero en mi lista de proyectos es realmente conseguir cosas para los demás,y eso,hoy por hoy,me entusiasma.
Así que,mientras recpero ánimo,fuerza,espíritu navideño y demás
Ho ho ho
Feliz navidad